17/01/14
20:24
Tercer día. Hoy hace un viento
frío frío. Las temperaturas han bajado y ha llovido. De hecho me ha llovido
encima, aunque por suerte ha sido leve.
Me esperaba un cansancio mayor en
las piernas y sobre todo pulmonar. Sin embargo, para mi sorpresa, he llegado a
Ramon y Cajal con Marcenado casi con la boca seca, apenas una leve fatiga en
las piernas y la respiración rítmica e incesante no iba forzada.
Ha sido un día duro el de hoy.
Gamonal ha conseguido detener las obras. He visto también un video de respuesta
a la famosa carta de un policía, video hecho por un ex policía con bastante
seriedad y humildad.
Mi cita de las 18h para tatuarse no se ha presentado, ni
ha dado señales de vida, algo que por desgracia sufrimos en esta profesión más
de lo que quisiéramos, por gente maleducada o que no tiene en consideración el
tiempo de los demás.
Como el día, hoy era gris y
pesado para mí. He aprovechado el día en diseñar y adelantar futuros tattoos,
bajar al gym a entrenar un poco mi pobre y desatendida espalda, leer la
biografía de Rasputín, más que interesante para cualquiera que le gusten las
historias con tramas monárquicas y libertinaje por doquier.
Estaba frente al ordenador ya,
viendo videos en Youtube y se acercaba la hora de correr. Curiosamente hoy no
sentía pereza, incluso tenía ganas de ponerme de nuevo a prueba. Mis agujetas
estaban apenas visibles, y me encontraba bastante enérgico aún después de la
sesión de pesas.
Al salir, el golpe de aire frío
me ha quitado las ganas. Por suerte, ya me he hecho con unos guantes. He
ajustado la aplicación de Running, y me he puesto manos a la obra. Lo dicho,
leve fatiga en las piernas, el ritmo de respiración me sigue costando cogerlo
al principio, pero una vez comienzo a verme forzado, mi boca se hace cargo del
aire y casi inconscientemente lo controlo. Solo me concentro en seguir, en
respirar y mirar al suelo, ya que mirar al horizonte a veces, cuando me siento
bastante fatigado, solo ayuda a que pase por mi mente que queda mucho, que no
voy a aguantar y la tentativa de dejarlo. Asi que mirada al suelo, y seguir
moviendo las piernas y los brazos bajo la lluvia.
El último tramo final, para
variar, se ha hecho duro, aunque un paso más en mi progresión hay que añadir,
solo las tres últimas calles. Contento, he mirado la aplicación, y para mi
sorpresa, la mierda esta no tenía el GPS reconocido, asi que solo me ha marcado
el tiempo: 11min 52seg.
Si, parece poco, y supongo que lo
es. Que quizás necesitase más tiempo, o un recorrido más largo, no lo sé, pero
por el momento, a mi me sirve. Creedme cuando digo que vengo empapado en sudor,
y los primeros minutos después de parar, hacer algo que no sea respirar se hace
complicado. Es poco tiempo, pero las pendientes que suben y bajan compensan
quizás esa marca.
El barrio de Prosperidad, en mi opinión, se
hace idónea para eso. Tiene cuestas empinadas, bajadas también bastante
precipitadas, pendientes largas que se hacen duras y desniveles que la
convierten en una buena elección para hacer una carrera, que sin bien corta, no
falta de intensidad ni intervalos. Por eso quizás, el recorrido que escogí el
primer día, un poco al azar, ha sido el adecuado.
Ahora sin más, ducha y a comerme
un sándwich de pavo, una manzana o plátano y un yogurt griego. xD
Buenas
noches.
¿Cuestas empinadas? Te invito a que corras por Alcobendas.....
ResponderEliminar